INFORMACIÓN
Esta mermelada fusiona la frescura vibrante de la manzana verde con la dulzura láctea y aterciopelada del chocolate blanco, dando como resultado un sabor único, elegante y equilibrado.
Su versatilidad la hace perfecta para desayunos y meriendas, pero también para uso culinario. Es un acompañamiento excepcional para tablas de quesos, combina de maravilla en tapas creativas, funciona como guarnición de bizcochos y es ideal como relleno de tartas o elaboraciones reposteras más sofisticadas.
Un producto pensado para disfrutar y experimentar con nuevos matices y contrastes.
Conservación: temperatura ambiente.
Consumo preferente: 3 años.




